Volver

27 Ago 2020.

Organismos adaptados a ambientes salinos y fríos ayudan a entender la habitabilidad de Marte

Un equipo de investigadores del Centro de Astrobiología (CAB, CSIC-INTA) ha estudiado la capacidad de algunos microorganismos para adaptarse a ambientes salinos y fríos mediante el uso de moléculas capaces de controlar el proceso de congelación. Los resultados muestran una estrecha relación ambiente-microorganismo que abre una novedosa vía de investigación astrobiológica sobre la habitabilidad de salmueras heladas en Marte.

Astrobiología , CAB , extremófilos , Marte

Mosaico de imágenes tomadas por la Mastcam a bordo del rover Curiosity durante el sol 52, o día marciano, de la misión (28 de septiembre de 2012). En los análisis de las muestras recogidas se descubrió la presencia de percloratos. Créditos: NASA/JPL-Caltech/MSSS.

Los microorganismos extremófilos son una herramienta fundamental para entender cómo la vida se ha abierto camino en la Tierra y también para el estudio de la habitabilidad fuera de nuestro planeta. Dentro de la gran variedad de organismos extremófilos, los más interesantes son los denominados poliextremófilos, aquellos organismos capaces de sobrevivir en ambientes que presentan varias condiciones extremas simultáneamente, por ejemplo, ambientes con bajas temperaturas (psicrófilos) y con alto contenido en sal (halófilos). Estas condiciones, precisamente, se dan en algunas regiones de Marte como el cráter Gale, donde se ha detectado la presencia de un tipo de sales especialmente higroscópicas (que absorben agua) y caotrópicas (que desestabilizan las moléculas de agua y otras macromoléculas de las células, provocando que éstas se rompan): los percloratos, siendo el perclorato de magnesio el predominante. Esta similitud en las condiciones de ambos ambientes hace especialmente relevante el estudio de los organismos terrestres, por las importantes implicaciones astrobiológicas y la habitabilidad de los entornos marcianos.

En un reciente estudio, realizado por un equipo de investigadores del Centro de Astrobiología (CAB) y publicado en la revista Astrobiology, se ha analizado, en concreto, la interacción medio-bacteria para estas condiciones de baja temperatura y alto nivel de salinidad, utilizando para ello un microorganismo halotolerante y psicrófilo, la bacteria Rhodococcus sp. JG3, capaz de sobrevivir a altas concentraciones de sales y temperaturas bajo cero.

Este microorganismo podría, como se sabe para muchos psicrófilos y, concretamente, otras bacterias de su mismo género, disponer en su maquinaria molecular de las denominadas proteínas de unión al hielo (Ice Binding Proteins, o IBPs por sus siglas en inglés) para adaptarse a condiciones de congelación. Estas proteínas tienen la capacidad de unirse al hielo para modificar su configuración cristalina y controlar así el proceso de congelación, promoviéndolo (Ice Nucleation Proteins, INP) o bloqueándolo (Antifreeze Proteins, AFP), de manera que varían la temperatura a la que el agua cambia de fase. Esto supone una enorme capacidad de adaptación y proporciona situaciones ventajosas como la creación de microambientes alrededor de la célula con agua líquida disponible a temperaturas bajo cero, aumentando así su ventana de supervivencia.

Como señala Laura García Descalzo, investigadora del CAB y autora principal del estudio, “los primeros resultados obtenidos, aunque preliminares, plantean interesantes cuestiones que podrían abrir nuevas vías de investigación en Astrobiología: el estudio de cómo las adaptaciones, a nivel molecular, que los organismos extremófilos desarrollan para sobrevivir a las condiciones ambientales podrían, a su vez, influir sobre esas mismas condiciones, de manera que su propia supervivencia dependa, en gran parte, de la interacción microorganismo-ambiente”.

Para García Descalzo, el estudio “supone el inicio de una vía novedosa de investigación sobre la habitabilidad de salmueras heladas en Marte, que implica estudiar el potencial papel de los microorganismos y sus adaptaciones moleculares en soluciones de percloratos a temperaturas bajo cero para su propia supervivencia, pudiendo modular, a su vez, el medio en el que sobreviven gracias, entre otras cosas, al papel de proteínas tan interesantes como las IBPs”.

La identificación de las moléculas utilizadas por los microorganismos para adaptarse a las condiciones ambientales es, además, una valiosa fuente de información que puede ser utilizada como “marcador” de la presencia de vida.

Últimas noticias publicadas Ver más

07 Oct 2025 | Sevilla
Descubre celebra la Semana Mundial del Espacio con tres ‘Cafés con Ciencia’ para despertar vocaciones científicas
La Fundación Descubre y Sevilla Tech Park organizan estos encuentros donde tres investigadores andaluces cuentan su experiencia científica a un grupo de estudiantes del IES Ramón Carande y del IES Heliópolis mientras desayunan y charlan sobre su trabajo y otras curiosidades. Esta iniciativa se suma a las actividades que se celebran hasta el 10 de octubre en el marco de la Semana Mundial del Espacio 2025 (World Space Week, WSW).
Leer más
03 Oct 2025 | Sevilla
Sevilla lidera la Semana Mundial del Espacio 2025 con más de 40 actividades sobre el espacio
Sevilla se convierte, un año más, en la capital española del espacio con el arranque oficial de la Semana Mundial del Espacio 2025 – World Space Week, que se celebrará del 4 al 10 de octubre. El programa de actividades incluye propuestas tan variadas como talleres de astronomía, exposiciones, conferencias, charlas y hasta plantadas de telescopios, entre otras.
Leer más
25 Sep 2025 | Internacional
Los astronautas de Artemis II, listos para explorar la cara oculta de la Luna
Esta misión de la NASA, que podría partir en febrero del 2026, será clave para preparar el regreso del ser humano a la superficie lunar. Los astronautas ya han completado la fase crítica de entrenamiento y se disponen a validar tecnologías esenciales para futuras expediciones.
Leer más
Ir al contenido