Volver

21 Abr 2020. España

Líridas 2020 vistas desde la ventana

Durante la segunda quincena de abril se produce la lluvia anual de estrellas de las Líridas, cuando nuestro planeta atraviesa la nube de partículas que dejó hace más de un siglo un cometa. Su máximo será la noche del martes 21 al miércoles 22 y, con paciencia, se podrá ver alguna cruzando el cielo cada 10 o 15 minutos. Eso sí, desde casa.

Fuente: Agencia SINC

La lluvia de estrellas de las Líridas, que parecen proceder de la constelación de la Lira, se puede observar habitualmente cada año entre el 16 y  26 de abril. Cuando más se verán en este 2020 será la noche del 21 de abril.

Lluvia de estrellas de las Gemínidas observada desde el Observatorio del Teide. / J.C. Casado (starryearth).

En esta ocasión, al igual que los eventos astronómicos que han ocurrido desde que se decretó el estado de alarma por el coronavirus, habrá que ver estas ‘estrellas’ (en realidad no lo son) desde casa, y armados de paciencia, pues se espera que apenas pueda verse una cada 10 o 15 minutos.

Los cometas, en su órbita alrededor del Sol, dejan a su paso una estela de hielo, polvo y rocas. La Tierra, en su recorrido anual alrededor de la estrella, cruza estas nubes de pequeñísimas partículas, llamadas meteoroides. Cuando estos atraviesan la atmósfera terrestre, se produce una intensa fricción que origina los espectaculares trazos luminosos que vemos surcando el cielo.

El rastro de un cometa que pasó en 1861Durante estos días, estamos atravesando la nube de partículas que el cometa Thatcher (C/1861 G1) dejó tras de sí en su última visita al perigeo terrestre, en 1861.

Aunque es posible que desde mediados hasta finales de abril veamos alguno de estos meteoros desintegrarse en la atmósfera, el máximo de la lluvia de estrellas tendrá lugar la noche del martes 21 al miércoles 22 de abril, a partir de las 23:00 horas.

Además, esa noche, la Luna nueva estará de nuestra parte, para facilitarnos la hazaña de ver alguna “estrella fugaz”.

Las lluvias de meteoros reciben sus nombres de la constelación de la que parece que emanan. Las Líridas se llaman así porque su radiante (el punto del que parecen proceder) se encuentra en la constelación de la Lira, que podremos identificar porque contiene a la estrella Vega, una de las más brillantes del cielo nocturno.

Como curiosidad, en la película Contact, la señal extraterrestre que recibe el personaje interpretado por Jodie Foster proviene desde esa brillante estrella. Pero no será necesario que miremos hacia ella para tener la oportunidad de pedir deseos, como a veces se hace al ver estrellas fugaces. Bastará con que fijemos nuestra vista en un punto cualquiera del firmamento y esperemos, pacientemente unos minutos.

A lo largo del año puede haber hasta 50 lluvias de meteoros (destellos de luz que emiten la partículas o meteoroides), pero las más significativas son las Cuadrántidas, las Perseidas y las Gemínidas.

Durante la tarde previa al máximo de las Líridas, a partir de las 20:05 h (hora peninsular) el astrónomo del IAC y administrador del Observatorio del Teide, Miquel Serra-Ricart, hablará sobre ellas en una charla de un ciclo denominado #IACUniversoEnCasa.

Últimas noticias publicadas Ver más

16 Jun 2025 | Granada
Dos galaxias enanas se fusionan en el universo profundo, un fenómeno extremadamente raro
La Universidad de Granada lidera una investigación que, gracias a la tecnología del Observatorio de Calar Alto, ha descubierto este evento cósmico poco común.
Leer más
16 Jun 2025 | Granada
Nuevas claves para entender la pérdida del agua de Marte hace miles de millones de años
El estudio, liderado por el Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC), analiza el papel de la inclinación del eje de rotación de Marte en la pérdida de agua del planeta rojo. El equipo científico ha incorporado mejoras clave en el modelo climático empleado, lo que ha permitido representar con mayor precisión el escape actual de hidrógeno y, en consecuencia, la pérdida de agua al espacio.
Leer más
10 Jun 2025 | Internacional
El mito de la ‘luna de fresa’: ni es rosa ni un evento astronómico inusual
No se trata de un acontecimiento astronómico insólito, tan solo un plenilunio más de los que ocurren cada mes. Para César González, divulgador del Planetario de Madrid, su peculiaridad se debe a su nombre, ya que los indígenas americanos la llamaban así por la recolección de fresas en este momento del año.
Leer más
Ir al contenido