El cohete Ariane 6, más cerca de su primer vuelo tras la prueba de encendido del motor
El primer vuelo del Ariane 6 se acerca tras superar un importante ensayo a gran escala que reproduce cómo se encendería la etapa central del cohete durante un vuelo normal al espacio. Para esta prueba, realizada con un modelo, no se encendieron los propulsores, por lo que el sistema permaneció en la plataforma de lanzamiento del puerto espacial europeo en la Guayana Francesa, como estaba previsto. Este ha sido el ensayo más largo y completo hasta el momento para el módulo inferior de propulsión líquida, a lo que seguirá en diciembre una prueba final completa de la etapa superior
El nuevo cohete Ariane 6 de la ESA ha superado un importante ensayo a gran escala como preparación para su primer vuelo, en el que los equipos de tierra han realizado una cuenta atrás de lanzamiento y un encendido completo del motor de la etapa central de siete minutos, tal y como se produciría en un lanzamiento al espacio. Para este ensayo no se encendieron los propulsores, por lo que Ariane 6 permaneció en la plataforma de lanzamiento del puerto espacial europeo en la Guayana Francesa, como estaba previsto.
Esta prueba reproduce cómo se encendería la etapa central del cohete durante un vuelo normal al espacio. Una vez completado, el motor principal se apagaría y la etapa central se separaría de la superior, que asumiría el control de la propulsión y terminaría su misión. El ensayo, realizado con un modelo de prueba, ha sido el más largo y completo hasta el momento para el módulo inferior de propulsión líquida del Ariane 6, equipado con un motor Vulcain 2.1.
«Los equipos de Ariane, la CNES y la ESA han ejecutado ya todas las etapas de vuelo del cohete sin que este salga de la Tierra», afirma el director general de la ESA, Josef Aschbacher. «Este ensayo histórico se produce después de años de diseño, planificación, preparación, construcción y arduo trabajo de algunos de los mejores ingenieros espaciales de Europa. Volvemos a estar en el buen camino para garantizar el acceso autónomo de Europa al espacio. Enhorabuena a todos los implicados», subrayó.
El motor Vulcain 2.1 quemó casi 150 toneladas de combustible en los tanques de la etapa central del Ariane 6: oxígeno e hidrógeno líquidos, este último sobreenfriado a temperaturas inferiores a –250°. El 2.1 es una evolución del Vulcain 2 que convirtió al Ariane 5 en el sistema de lanzamiento europeo de mayor éxito hasta la fecha. La actualización tiene un diseño simplificado y más económico, y la nueva tecnología de la tobera del motor y del sistema de encendido se ha llevado del motor a la estructura de la plataforma de lanzamiento para hacer que la etapa funcione mejor y cueste menos.
Se necesitaron algo más de dos horas de operaciones minuciosas para cargar de combustible el núcleo central del cohete. Estas tareas se realizaron durante una larga cuenta atrás que incluyó otras pruebas de calificación, similares a ensayos anteriores de este año.
Para que fuera más realista y poder garantizar la estabilidad del lanzador, también se llenaron de combustible los tanques de la etapa superior, aunque el motor de esta etapa solo se activa una vez en órbita tras separarse de la etapa principal y, por lo tanto, no se encendió durante esta prueba en tierra. La plataforma de lanzamiento, operada por la agencia espacial francesa CNES, utilizó su sistema de diluvio de agua para atenuar el calor del motor.
A falta de la prueba final
El director de Transporte Espacial de la ESA, Toni Tolker-Nielsen, manifestó su confianza en los equipos europeos que trabajan para que Ariane 6 pueda empezar a dar servicio. «Un enorme agradecimiento a todos nuestros dedicados colegas que están comprometidos y trabajan incansablemente para ver volar este cohete».
La prueba siguió a un ensayo de encendido más corto realizado en septiembre (conocido como CTLO1), cuando se llenaron los tanques del Ariane 6 y su motor Vulcain 2.1 se encendió y apagó brevemente, y la prueba de llenado y vaciado que se realizó en octubre (conocida como CTLO2 .1) para comprobar las funciones del sistema de lanzamiento, como el vaciado de combustible en presencia de múltiples fallos simulados.
Se está preparando una prueba final completa de la etapa superior en diciembre de 2023 en el centro de pruebas de Lampoldshausen, de la agencia aeroespacial alemana DLR.