La India logra aterrizar en el polo sur de la Luna
La misión ‘Chandrayaan-3’ se ha posado este miércoles en el inexplorado polo sur lunar donde, entre otros objetivos, investigará la presencia de agua helada. La India se convierte así en el cuarto país que aluniza en nuestro satélite, tras Estados Unidos, Rusia y China.
Tras superar los denominados «20 minutos de terror» durante una complicada maniobra de descenso, el módulo Vikram («valeroso» en sánscrito) ha aterrizado poco después de las 14.30 horas (hora peninsular española) en el polo sur de la Luna, según ha confirmado y retransmitido en directo la Organización de Investigación Espacial de la India (ISRO).
El ‘aterrizador’ Virkram, junto al rover Pragyan («sabiduría»), componen la misión Chandrayaan-3, cuyos objetivos son demostrar que se puede realizar un aterrizaje seguro y suave en la superficie lunar y desplazar el pequeño vehículo explorador, además de realizar experimentos científicos.
Entre ellos destaca la obtención de datos sobre la composición mineral del satélite y la presencia de agua helada –un valioso elemento para la futura exploración espacial– en esta región meridional de la Luna.
Un periodo corto de exploración en la Luna
Está previsto que la misión se mantenga activa durante un período de luz lunar (unos 14 días terrestres), aunque no se descarta que pudiera prolongarse algún tiempo más.
«Hemos logrado un aterrizaje suave en la luna», ha confirmado el director ejecutivo de ISRO, Sreedhara Panicker. Tras la compleja maniobra y el éxito de la operación, la India se convierte en el cuarto país en lograr alunizar en el satélite, un hito solo logrado por EE UU, Rusia y China.
Sin embargo, el país asiático es el primero que llega con éxito al polo sur lunar, tras el intento fallido de la misión rusa Luna-25 el pasado fin de semana. Chandrayaan-3 ha necesitado 40 días para su recorrido desde que despegó el pasado 14 de julio con el cohete de lanzamiento más grande y pesado de la India.
El primer ministro indio, el nacionalista hindú Narendra Modi, que se encuentra actualmente en Sudáfrica para asistir a la cumbre de líderes de los BRICS, hizo una pausa en su participación para seguir en línea el momento del alunizaje. «Estos momentos históricos se convierten en la conciencia eterna de la vida de la nación, un grito de victoria para la nueva India», ha subrayado el primer ministro visiblemente emocionado.
La India busca superar el fracaso de la misión anterior
El alunizaje es un logró especial para la India que vio en 2019 el fracaso de su misión predecesora, el Chandrayaan-2, que tenía el mismo objetivo y que fracasó justamente en la maniobra de desaceleración para tocar la superficie lunar.
En aquella ocasión, la memoria del país quedó marcada por la imagen del primer ministro tratando de consolar con un abrazo al entonces jefe de ISRO, Kailasavadivoo Sivan, que rompió en llanto con el fracaso. «Hicimos una promesa en la Tierra y la cumplimos en la Luna. Nuestros camaradas científicos han declarado que India está ahora en la Luna», ha añadido Modi.
La agencia espacial india había explicado antes que el descenso de los últimos 25 kilómetros desde el espacio hasta la superficie lunar era la parte «más crítica del aterrizaje». En este paso, la velocidad de aterrizaje era de unos 1,68 kilómetros por segundo, con el Chandrayaan-3 en posición horizontal, así que la maniobra consistirá en pasar a la posición vertical durante el descenso, que dependería de la precisión de un cálculo matemático. Un error en este cálculo fue el que causó que el Chandrayaa-2 fallara en septiembre de 2019.
El centro de mando de la misión, el MOX, repleto de científicos, invitados y periodistas comenzó a aplaudir de emoción y a abrazarse unos a otros conforme la distancia de descenso superó los dos kilómetros en cuenta regresiva, con la velocidad en constante descenso y superando la marca del intento anterior. En breve comenzarán las operaciones del módulo de aterrizaje y el rover indios en el polo sur lunar.
Creciente interés mundial en la Luna
La India hace historia al convertirse en el primer país que consigue aterrizar una nave no tripulada en el polo sur de la Luna, pero no es el único con los ojos puestos en nuestro satélite natural. Desde hace unos años la carrera a la Luna se ha vuelto a reactivar, con varios países en la contienda.
Entre ellos destaca el programa Artemisa, que aspira a permitir el regreso de astronautas a la superficie lunar no antes de 2025. Para este ambicioso plan la NASA no está sola, pues cuenta con el apoyo de otras agencias internacionales como la Agencia Espacial Europea (ESA) y la alianza de más de 25 países en los Acuerdos de Artemis, entre ellos España o la misma India, que firmaba el acuerdo recientemente. De esta forma Estados Unidos impulsa un marco común para la exploración lunar y la utilización de sus recursos.
Son muchos los interrogantes abiertos en torno a nuestro satélite, a pesar de hallazgos relevantes como la existencia de agua en la superficie lunar, y es fundamental entenderlos para seguir explorando el espacio profundo.